domingo, 11 de octubre de 2009

Mensaje a la poesía




No puedo
No es posible
Díganle que es totalmente imposible
Ahora no puede ser
Es imposible
No puedo

Díganle que estoy tristísimo, pero esta noche no puedo ir a su encuentro.
Cuéntenle que hay millones de cuerpos por enterrar
Muchas ciudades por reconstruir, mucha pobreza en el mundo;
Cuéntenle que hay en alguna parte del mundo una criatura llorando
Y las mujeres están volviéndose locas y hay legiones de ellas que tortura
la nostalgia de sus hombres; cuéntenle que hay un vacío
en los ojos de los parias, cuya inanición es extrema; cuéntenle
que la vergüenza, la deshonra, el suicidio, rondan el hogar
y que se quiere reconquistar la vida.


Vinicius


sábado, 10 de octubre de 2009

Déjame Sueltas Las Manos


Déjame sueltas las manos
y el corazón, déjame libre!
Deja que mis dedos corran
por los caminos de tu cuerpo.
La pasión ?sangre, fuego, besos?
me incendia a llamaradas trémulas.
Ay, tú no sabes lo que es esto!

Es la tempestad de mis sentidos
doblegando la selva sensible de mis nervios.
Es la carne que grita con sus ardientes lenguas!
Es el incendio!
Y estás aquí, mujer, como un madero intacto
ahora que vuela toda mi vida hecha cenizas
hacia tu cuerpo lleno, como la noche, de astros!

Déjame libre las manos
y el corazón, déjame libre!
Yo sólo te deseo, yo sólo te deseo!
No es amor, es deseo que se agosta y se extingue,
es precipitación de furias,
acercamiento de lo imposible,
pero estás tú,
estás para dármelo todo,
y a darme lo que tienes a la tierra viniste?
como yo para contenerte,
y desearte,
y recibirte!

Pablo Neruda

viernes, 9 de octubre de 2009

Anoche cuando dormía




Anoche cuando dormía
soñé ¡bendita ilusión!
que una fontana fluía
dentro de mi corazón.
Dí: ¿por qué acequia escondida,
agua, vienes hasta mí,
manantial de nueva vida
en donde nunca bebí?

Anoche cuando dormía
soñé ¡bendita ilusión!
que una colmena tenía
dentro de mi corazón;
y las doradas abejas
iban fabricando en él,
con las amarguras viejas,
blanca cera y dulce miel.

Anoche cuando dormía
soñé ¡bendita ilusión!
que un ardiente sol lucía
dentro de mi corazón.
Era ardiente porque daba
calores de rojo hogar,
y era sol porque alumbraba
y porque hacía llorar.

Anoche cuando dormía
soñé ¡bendita ilusión!
que era Dios lo que tenía
dentro de mi corazón.





domingo, 4 de octubre de 2009

Mercedes Sosas - La Negra

La radio, la televisión, el diario, y las revistas ya lo dicen todo de vos. Lo único que agrego es que fuiste, sos y serás muy importante para mí.




domingo, 27 de septiembre de 2009

Mujer al Sol



Una mujer al sol es todo mi deseo,

viene del mar, desnuda, con los brazos en cruz

y la flor de los labios abierta para el beso

y en la piel refulgente el polen de la luz.

Una hermosa mujer, los senos en reposo y
caliente de sol,

nada más se precisa.

El vientre terso, el pelo húmedo y una sonrisa
en la flor de los labios,

abierta para el gozo.

Una mujer al sol sobre quien yo me arroje

y a quien beba y me muerda y con quien me lamente,

y que al someterse se enfurezca y solloce,

e intente rechazarme, y que al sentirme ausente

me busque nuevamente y se quede a dormir

cuando yo, apaciguado, me disponga a partir.


(Vinicius de Moraes)

Mis Amigos me premiaron






Gracias Lucia!!!!




Tiene reglas hay que pasarselo a los amigos:



sábado, 26 de septiembre de 2009

Mujer Madura


La Mujer Madura sabe lo que realmente quiere...Se conoce lo suficiente a sí misma para saber dónde...cuándo...cómo y con quién quiere realizar algo...sin importar el qué dirán y...aún muchas veces por encima de la opinión de su pareja...esto es Sinceridad...
La Mujer Madura nunca se involucra en un escándalo...Si descubre una infidelidad...no se pondrá a la altura de ninguna otra mujer...sino que conservará su compostura con firmeza y decisión...pero sin vacilar un instante para poner en su sitio a quien la traiciona...esto es Dignidad...
La Mujer Madura conoce sus Atributos y...no siente temor ni celos de reconocer los de otra Mujer...aunque no sea de su agrado...porque ella sabe que para cada quién Existe su cada cual...esto es Equidad...
La Mujer Madura no necesita que su pareja le de un calendario de actividades para ella saber dónde está y qué hace...porque se siente Ama y Señora de la situación...esto es Seguridad...
La Mujer Madura no revisa a su pareja cuando llega...ni le despierta a media noche para preguntarle qué está pensando...sabe que su compañero está con ella y... no necesita reafirmar su seguridad en sí misma con estos detalles...esto es Carácter...
La Mujer Madura mantiene su espacio y no invade el de su pareja...sabe reconocer que no es propiedad ni tampoco propietaria de nadie...porque tiene Amor por sí Misma y por su Compañero...esto es Respeto...
La Mujer Madura sabe aceptar las diferencias de gustos sin hacer pataletas para salirse con la suya...acepta sus derrotas sin manipular la situación...esto es Humildad...
La Mujer Madura no se guarda una palabra de apoyo o...un gesto de aprobación... porque conoce el valor de sentirse Apreciada...esto es Generosidad...
La Mujer Madura no busca vengarse con las mismas armas...ella conoce el Dolor que ocasiona y...cuánto lastima una palabra o...un gesto inoportuno...esto es Lealtad...
La Mujer Madura no teme decir la Verdad de una manera clara y serena...sin enmascarar sus sentimientos...pero sin lastimar al otro...esto es Honestidad...
La Mujer Madura no necesita poner un espía detrás de nadie...a ella le basta una mirada para develar el Alma de quién comparte su Vida...esto es Confianza...
La Mujer Madura ha aprendido a interpretar la vida...conoce su lugar y lo asume con propiedad...porque conoce su papel en la Vida...Ama simplemente y...se deja Amar...esto es Sabiduría...

Luis A. Cáceres Gómez

sábado, 19 de septiembre de 2009

No entiendo por qué volviste


"(...) -No entiendo por qué volviste.Y retira la mano. La mano de Mariano queda sola sobre la mesa, con la palma vuelta hacia arriba. Tiene la línea de la vida larga pero muy tajeada. -No entiendo. Me habías dicho: "No nos vamos a ver más. Somos libres". Yo me quedé muda mirándote la espalda y te perdiste en la esquina de la estación. ¿Qué esperabas? ¿Que te corriera atrás? ¿Que te llamara a gritos? ¿Para qué quería yo esa libertad que me regalabas? ¿Para qué la quería?(Mariano escuchaba los ecos de sus propios pasos y llevaba la cabeza vacía por dolorosa victoria de la voluntad, pero al llegar a la estación del ferrocarril se le metió por los oídos el estrépito de la máquina aproximándose, y entonces supo que desde ahora le harían falta los navegantes misteriosos que tan a menudo se perdían, por puro gusto, en los desfiladeros de niebla de la memoria o la imaginación de esta muchacha. Trepó por los peldaños de fierro y supo que ella sería, desde ahora, una nuca entrevista en la muchedumbre o un perfil que se escapa, una voz adivinada entre otras voces. Que él se daría vuelta bruscamente y echaría a correr y tomaría a una mujer por el brazo: que se equivocaría siempre. Entró al vagón de pasajeros y se sentó en uno de los viejos asientos de paja de la época de los ingleses y supo que ella persistiría: escuchó el traqueteo de las ruedas sobre los rieles y supo que ella persistiría, persistirá: en verano, en los túneles de hojas, convertida en un sanantonio que te camina por el brazo, o en las noches de julio, llenando una silla vacía en la complicidad humosa de los cafés. Llegó a destino y se bajó, mareado, y seguía sabiendo que ella continuaría oliendo a sí misma en su memoria, deambulando desnuda por la región nochera de sus sueños: que ella sería, que será, una cicatriz que a veces hace cosquillas y a veces late y a veces arde y a veces duele. Y sintió la necesidad de volver y por lo menos decir: "Nunca nada". Por lo menos decir: "Como esto, nunca nada". Y no volvió.) - Clara.- Sí. (...)

"La Canción de Nosotros, 1975.

Eduardo Galeano

sábado, 12 de septiembre de 2009

EL VALIOSO TIEMPO DE LOS MADUROS.





“..Conté mis años y descubrí, que tengo menos tiempo para vivir de aquí en adelante, que el que viví hasta ahora...

Me siento como aquel chico que ganó un paquete de golosinas:
las primeras las comió con agrado, pero, cuando percibió que quedaban pocas, comenzó a saborearlas profundamente.

Ya no tengo tiempo para reuniones interminables, donde se discuten estatutos, normas, procedimientos y reglamentos internos, sabiendo que no se va a lograr nada.

Ya no tengo tiempo para soportar absurdas personas que, a pesar de su edad cronológica, no han crecido.
Ya no tengo tiempo para lidiar con mediocridades.
No quiero estar en reuniones donde desfilan egos inflados.

No tolero a maniobreros y ventajeros.
Me molestan los envidiosos, que tratan de desacreditar a los más capaces, para apropiarse de sus lugares, talentos y logros.

Detesto, si soy testigo, de los defectos que genera la lucha por un majestuoso cargo.
Las personas no discuten contenidos, apenas los títulos.
Mi tiempo es escaso como para discutir títulos.
Quiero la esencia, mi alma tiene prisa.........

Sin muchas golosinas en el paquete...

Quiero vivir al lado de gente humana, muy humana.
Que sepa reír de sus errores.
Que no se envanezca con sus triunfos.
Que no se considere electa antes de hora.
Que no huya de sus responsabilidades.
Que defienda la dignidad humana.
Y que desee tan sólo andar del lado de la verdad y la honradez.

Lo esencial es lo que hace que la vida valga la pena.
Quiero rodearme de gente, que sepa tocar el corazón de las personas…..
Gente a quien los golpes duros de la vida, le enseñó a crecer con toques suaves en el alma.

Sí…. tengo prisa… por vivir con la intensidad, que solo la madurez puede dar.

Pretendo no desperdiciar parte alguna, de las golosinas que me quedan…
Estoy seguro que serán más exquisitas, que las que hasta ahora he comido.

Mi meta es llegar al final satisfecho y en paz con mis seres queridos y con mi conciencia.
Espero que la tuya sea la misma, porque de cualquier manera llegarás


Mensaje de Mario de Andrade (Poeta, novelista, ensayista y musicólogo brasileño)

jueves, 10 de septiembre de 2009

Secreto a Voces



¿Como se llama él? me han preguntado,
y yo queriendo proteger nuestro secreto
¿Como se llama quién? he contestado,
y más que una contesta es casi un reto.

A nadie le diré que es ese amigo
jovial, atento, serio y respetuoso.
Que en todos los momentos está conmigo,
y aún en la tormenta, trae reposo.

Yo no comentaré de su existencia
a no ser que me vean a su lado.
Y aún así, he de tener prudencia
para que no sospechen que lo amo.

Guardaré ese secreto que es mi gloria,
sin pronunciar tu nombre ni apellido.
Porque entonces iba a cambiar la historia,
del dulce amor que nos mantiene unidos.

¿Como se llama él? aún me preguntan,
porque tal vez sospechen que es concreto,
que los dos nos amamos como nunca,
¡aunque a voces guardemos el secreto!


Patricia Sereno

domingo, 6 de septiembre de 2009

Poemas de Antonio De Saavedra



A veces cuando enciendes el fuego.
Reconozco las amables lluvias
Nacidas entre las nubes
de tu aroma de lejano jardín de galaxias
Y su calor derrite toda tristeza
abriga toda alegría
Palpitan los cuerpos herbosos
Como en un día de otoño en los parques
Cuando suena el viento inmaculado
Y se entregan para ser retratados en copos de nieve
Traigo fértiles presencias y recuerdos
Para que aún vibren en nuestros pechos el cielo y el mar
Porque te amo girando mi silencio de entresueño
Hacia tus manos pintoras
Pues te doy estas palabras de fruta fresca
Las que conoces desde el nido
Tú las alimentas con porciones de sombras
Con vaho de neblinas con gotas de mercurio
Cuando abren sus párpados ellas te buscan entre las flores
Y les das todo el cariño que te sea posible
Encuentro en los árboles hermosos insectos
Hijos de la luz y del agua
Con el que les das aliento y vida
Ahora todo ha quedado ordenado
Cada estrella en su órbita
Cada ojo en su espejo cada corazón en su esplendor.
Y nuestro amor en continuo movimiento hacia la eternidad

Antonio de Saavedra

Hemos caminado de la mano


Con viejitas y niños mirando/ con perros fornicando de testigos/ bajo las luces artificiales de la capital que carece de estrellas todos los veranos.// Hemos descarnado nuestras bocas con el filo infantil de nuestros dientes de hombre, que comparados con los de cualquier animal no serían más que materia maleable.// Hemos empapado de saliva nuestros cuellos/ en el transporte urbano/ a plena mañana/ con jugo de limón/ al caer la tarde// Hemos abrazado nuestras lenguas como si las despedidas significaran que alguno va a morir al bajar del bus/ hemos dañado nuestras pieles/ arañando la almohada/ destruyendo las cabeceras de las camas/mezclándonos entre la ropa que huye despavorida ante estos huracanes producidos por las variaciones climáticas que se generan entre nuestros cuerpos.// Hemos intercambiado temperaturas//ya no soy más un iglú cerrado por derribo donde mean los osos polares// ahora mi cuerpo es un charco tibio donde los gorriones vienen a limpiarse las plumas y a beber con los amigos.

Publicado por Poemas Co., Karina Valcarcel

sábado, 22 de agosto de 2009

Una mujer completa


Que nadie haya sido tan afortunado de darse cuenta la mina de oro que tu eres, no significa que brilles menos
Que nadie haya sido lo suficientemente inteligente para darse cuenta que mereces estar en la cima, no te detiene para lograrlo.
Que nadie se haya presentado aún para compartir tu vida, no significa que ese día esté lejos.
Que nadie haya venido a alejar la soledad con su amor, no significa que debas conformarte con lo que sea.
Que nadie te haya amado con esa clase de amor que has soñado, no quiere decir que tengas que conformarte con menos.
Que aún no hayas recogido las mejores cosas de la vida, no significa que la vida sea injusta.
Que Dios esté pensando en un hermoso príncipe para ti, no significa que tu no seas ya reina.
Solo por que la situación no parece estar progresando por ahora, no significa que necesites cambiar nada.
Sigue brillando, sigue corriendo, sigue esperando, sigue viviendo, sigue siendo exactamente como tu eres: ¡Una mujer completa!
La falta de amor y reconocimiento en las mujeres como así también la falta de valorización y agradecimiento, de cariño, y de otras ternuras y gestos, nos hace sentir poco valiosas, poco importantes…
Pero la falta de pareja en la mujer hace que sienta como que no vale lo suficiente para tenerla, entonces su autoestima se ve día a día lastimada y deja de reconocerse como una gran mujer, para sentirse sola y hasta incluso abandonada…
Siente por momentos que la felicidad del gran amor no es posible y en esa confusión en un determinado momento se prepara para seguir estando sola toda la vida…
Y no es así, todo llega en el momento justo, ni antes ni después.
Todo se logra pero es importante aprender a quererse, a asumirse y a sentirse bien con una misma.
Si logramos estar bien en soledad, si una a una todas las partes de nuestro cuerpo crean una armonía perfecta, si dejamos de lado ciertas obsesiones para dar paso a la vida y no esperamos, solo nos dejamos llevar y no buscamos, solo abrimos el corazón y el alma dispuestas a dar lo mejor de nosotras…
Todo parece se encuentra sin ninguna explicación lógica… por que si… por que se dio…
Por que de pronto alguien detuvo la mirada en nosotras y en esos ojos vimos un camino por el que transitaríamos nosotros… los dos…luego.
No somos menos si estamos sin un compañero…tal vez podríamos tener muchos y no ser felices con ninguno.
No somos menos por que en este momento estamos sin pareja, o por que un hombre nos abandonó…
No somos menos si habiendo amado mucho, un hombre no supo valorar ese amor.
Claro que no somos menos, somos importantes en la vida, en la lucha diaria, en el abrazo, solo merecemos amores de verdad, de aquellos que nos contienen, que nos respetan, que nos llevan de la mano, pero que siempre y en todo momento nos permiten; ser, sentir y crecer…
Hay diferentes tipos de amor que muchas veces no lo son, parecen serlo pero nada más.
Hay personas que tienen pareja pero se sienten tan solas y vacías como si no las tuvieran.
Hay otras que por no esperar deciden caminar al lado de alguien equivocado y en su egoísmo, no permite que ese alguien se aleje aún sabiendo que no le hace feliz.
Hay personas que sostienen matrimonios o noviazgos ya destruidos, por el simple hecho de pensar que estar solos es difícil e inaceptable.
Hay personas que deciden ocupar un segundo lugar tratando de llegar al primero, pero ese viaje es duro, incómodo y nos llena de dolor y abandono.
Pero hay otras personas que están solas y viven y brillan y se entregan a la vida de la mejor manera.
Personas que no se apagan, al contrario, cada día se encienden más y más.
Personas que aprenden a disfrutar de la soledad por que las ayuda a acercarse a si mismas, a crecer y a fortalecer su interior.
Esas personas son las que un día sin saber el momento exacto ni el por qué se encuentran al lado del que las ama con verdadero amor y se enamoran de una forma maravillosa.
Una mujer completa no necesita muletas, vive y se entrega día a día, y cuando se enamora se entrega a ese amor sin dejar de ser ella misma.

Madre Teresa de Calcuta

El poeta pide a su amor que le escriba


Amor de mis entrañas, viva muerte,
en vano espero tu palabra escrita
y pienso, con la flor que se marchita,
que si vivo sin mí quiero perderte.
El aire es inmortal.
La piedra inerte
ni conoce la sombra ni la evita.
Corazón interior no necesita
la miel helada que la luna vierte.
Pero yo te sufrí.
Rasgué mis venas, tigre y paloma,
sobre tu cintura en duelo
de mordiscos y azucenas.
Llena, pues, de palabras mi locura
o déjame vivir en mi serena
noche del alma para siempre oscura.
(1898-1936)

La noche en la isla


Toda la noche he dormido contigo
junto al mar, en la isla.
Salvaje y dulce eras entre
el placer y el sueño,
entre el fuego y el agua.
Tal vez muy tarde nuestros sueños
se unieron en lo alto o en el fondo,
arriba como ramas que un mismo viento mueve,
abajo como rojas raíces que se tocan.

Tal vez tu sueño se separó del mío
y por el mar oscuro me buscaba
como antes, cuando aún no existías,
cuando sin divisarte navegué por tu lado,
y tus ojos buscaban
lo que ahora-pan, vino, amor y cólera-
te doy a manos llenas porque tú eres la copa
que esperaba los dones de mi vida.

He dormido contigo toda la noche mientras
la oscura tierra gira con vivos y con muertos,
y al despertar de pronto en medio de la sombra
mi brazo rodeaba tu cintura.

Ni la noche, ni el sueño pudieron separarnos.
He dormido contigo y al despertar
tu boca salida de tu sueño
me dio el sabor de tierra,de agua marina,
de algas, del fondo de tu vida,
y recibí tu beso mojado por la aurora
como si me llegara del mar que nos rodea.

Pablo Neruda (1904-1973)

lunes, 17 de agosto de 2009

Dolor




Quisiera esta tarde divina de octubre
pasear por la orilla lejana del mar;
que la arena de oro, y las aguas verdes,
y los cielos puros me vieran pasar.

Ser alta, soberbia, perfecta, quisiera,
como una romana, para concordar
con las grandes olas,
y las rocas muertas
y las anchas playas que ciñen el mar.

Con el paso lento, y los ojos fríos
y la boca muda, dejarme llevar;
ver cómo se rompen las olas azules
contra los granitos y no parpadear;
ver cómo las aves rapaces se comen
los peces pequeños y no despertar;
pensar que pudieran las frágiles barcas
hundirse en las aguas y no suspirar
ver que se adelanta, la garganta al aire,
el hombre más bello, no desear amar...

Perder la mirada, distraídamente,
perderla y que nunca la vuelva a encontrar:
y, figura erguida, entre cielo y playa,
sentirme el olvido perenne del mar.


Alfonsina Storni

domingo, 16 de agosto de 2009

Gustavo A. Bécquer


Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a sus cristales
jugando llamarán.
Pero aquellas que el vuelo refrenaban tu hermosura
y mi dicha a contemplar,
aquellas que aprendieron nuestros nombres...
¡esas... no volverán!.
Volverán las tupidas madreselvas
de tu jardín las tapias a escalar,
y otra vez a la tarde aún más hermosas
sus flores se abrirán.
Pero aquellas, cuajadas de rocío
cuyas gotas mirábamos temblar
y caer como lágrimas del día
... ¡esas... no volverán!
Volverán del amor en tus oídos
las palabras ardientes a sonar;
tu corazón de su profundo sueño
tal vez despertará.
Pero mudo y absorto y de rodillas
como se adora a Dios ante su altar,
como yo te he querido...; desengáñate,
¡así... no te querrán!

sábado, 8 de agosto de 2009

Se me olvidó



Yo, te recuerdo cariño
Mucho fuiste para mi
Siempre te llame mi encanto
Siempre te llame mi niña
Hoy, tu nombre no se me olvida
Se me olvido que te olvide
Se me olvido que te deje
Lejos, muy lejos de mi vida
Se me olvido que ya no estas
Y ya ni en mi, tu ni te acordaras
Y me volvió a sangrar la herida
Se me olvido que te olvide
Y como nunca te encontré
Entre las sombras escondida
Se me olvido que te olvide
Y la verdad no se porque
Pues nada se me olvida

sábado, 1 de agosto de 2009

La máscara de la Muerte Roja



Relato en el que una misteriosa peste llamada "La Muerte Roja" ataca la ciudad de Próspero, príncipe de una ficticia nación, al cual le complacía darse todo tipo de placeres de los que un rey puede disfrutar, como el buen gusto, las artes, los bailes orquestados y fiestas rodeadas de diversión.
Al darse cuenta de que la peste atacaba a toda su región, decide encerrarse en su castillo junto con varios cientos de nobles de su corte, los cuales intentan escapar de la Muerte Roja.
Cierta noche, el rey decide realizar la mejor fiesta de disfraces jamás hecha. Para esto su castillo consta de siete aposentos pintados cada uno de diferente color y con vitrales del mismo tono de las paredes, a excepción de una habitación, la habitación negra, la cual tiene los vitrales pintados de rojo creando un ambiente terrorífico y fantasmal.
Mientras los invitados disfrutan de la fiesta, la gente continúa muriendo fuera, atacada por la enfermedad y sin ninguna ayuda.
Todos en el castillo bailan y se pasean por los aposentos, excepto por el negro, en el que se encuentra además un reloj de ébano que a cada hora interrumpen la fiesta con su lúgubre sonido, provocando entre los invitados una sensación de terror inexplicable.
Durante el transcurso de la fiesta, Próspero se fija en un extraño disfrazado con un atuendo blanco cual si fuera una mortaja, y el rostro cubierto por una máscara que representa una víctima de la Muerte Roja. El príncipe, que se siente gravemente insultado por ello, requiere al desconocido que se identifique. Después de una persecución por todos los salones de colores, llegan finalmente al negro, en donde el Príncipe arremete contra el extraño, al mismo tiempo lanza un grito de horror y cae muerto. Para horror de todos, el invitado se revela como la personificación de la misma Muerte Roja. A partir de ese momento, todos los ocupantes del castillo mueren uno a uno a causa de la Muerte Roja, justo en el momento en que el Reloj del Cuarto Negro marca la medianoche.

Edgar Allan Poe.